Animals A Picture Sourcebook Edited And Arranged By Don Rice



Precio : $ 25.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Libros Técnicos
Idioma : Castellano





1979
155 pages
Medidas :
21x27.8 cms.

Come Holy Spirit Renew The Whole Creation / Six Bible Studie



Precio : $ 17.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Religión
Idioma : Castellano





Friendship Press 1989
99 páginas
* Medidas :
15.2x22.8 cms.

Amériques Latines : Une Altérité / Centre Georges Pompidou





 Precio : $ 25.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Ensayos
Idioma : Francés






207 pages
1993
Medidas :
15.8x23.8 cms.

Conversion And The Catechumenate / Dick Dunning Moseley Cameli Braxton Searle Duffy




Precio : $ 23.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Religión
Idioma : Inglés






165 pages
1984
Medidas :
13.8x20.2 cms.

Mentoring The Ministry Of Spiritual Kinship / Edward C. Sellner



Precio : $ 23.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Religión
Idioma : Inglés





166 páginas
1990
Medidas :
14x20.8 cms.

Química Del Carbono / Eduardo Vitoria






Precio : $ 35.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Química
Idioma : Castellano





* tapa dura
1940
896 páginas
Medidas :
17.5x24.3 cms.

Eduardo Vitoria, químico y jesuita


En 1864 nacía en la localidad alicantina de Alcoy Eduardo Vitoria Miralles, pionero de los estudios de química orgánica en España.
En 1874 inicia el Bachillerato en Valencia, en el Colegio San José de los jesuitas. En 1881, finalizados los estudios medios, marcha a la Universidad Central de Madrid para estudiar Matemáticas, pero no se graduó porque deseaba hacerse jesuita. Así, en 1886 ingresa en el Noviciado que la Compañía tiene en Veruela. 

Después de realizar estudios en el mismo empieza, como alumno libre, la carrera en Ciencias Físico-Químicas en la Universidad de Barcelona, que finaliza en la de Valencia en 1896 con Premio Extraordinario y lo la peculiaridad de ser el primer estudiante en graduarse en la recién creada Facultad de Ciencias valenciana. Son años en los que simultanea la carrera con la docencia en el Colegio San José. Cuando completó sus estudios de Teología fue ordenado sacerdote.
Marcha después a la Universidad de Lovaina para realizar su tesis doctoral en Química Orgánica con el famoso Louis Henry (1834-1913). Su trabajo de investigación versó sobre la obtención del tricloropropanol-2 y fue defendido en 1904; obtuvo la  “Plus Grande Distinction”. Después realizó investigaciones de síntesis de otros compuestos orgánicos, desconocidos por entonces. 
Antes de volver a España visitó los laboratorios más importantes de Bélgica, Alemania y Francia y los conocimientos que allí adquirió fueron fundamentales para la tarea que iba a desempeñar en el Instituto Químico de Sarriá. En efecto, de regreso a España dirige los trabajos de edificación y acondicionamiento de lo que iba a ser el Laboratorio Químico del Ebro, que más tarde se transformó en el citado Instituto. 
De esos años es su obra más popular, Manual de Química moderna, teórica y experimental con sus aplicaciones al comercio y a la industria, que vio la luz en 1910 y de la que se llegaron a publicar más de cien mil ejemplares en nada menos que 14 ediciones. El año siguiente aparece Catálisis química, sus teorías y aplicaciones en el laboratorio y en la industria, el primer texto en castellano sobre el tema, de desarrollo muy incipiente en el momento de aparecer el libro.
Lo más significativo de la labor de Vitoria es su forma de concebir la enseñanza de la química, una manera auténticamente revolucionaria y sin paralelo en la España de esa y otras épocas. Y es que entendía que el alumnado debía de utilizar el laboratorio como la forma fundamental del aprendizaje de esa disciplina: creó un plan de estudios en el que diariamente se impartía una clase magistral y ¡7 horas! de trabajo experimental en el laboratorio. Con este fin escribió y publicó en 1912 una obra que ha sido punto de referencia: Prácticas Químicas para cátedras y laboratorios.
En noviembre de 1915, en Valencia, imparte conferencias de divulgación científica. En 1921 funda la revista Afinidad, la más antigua revista de química en lengua española  y en 1927 aparece el más importante de sus libros: La Química del Carbono, teórica y práctica con vistas muy especiales a la síntesis en el laboratorio y en la industria. 
En 1928 fue nombrado Presidente de la Sección de Ciencias Fisicoquímicas del Congreso de la Asociación Española para el progreso de las Ciencias que tuvo lugar en Barcelona.
Recibió la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio (1946) y la Medalla de Oro del Mérito en el Trabajo (1955).
Eduardo Vitoria falleció en Barcelona en 1958.

Informaciones Geográficas / Chile, Número Especial 1964



Precio : $ 6.900


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Geografía
Idioma : Castellano





1964
208 páginas
Medidas :
17.2x25.7 cms.
Roland Paskoff (20 de marzo de 1933 - 14 de septiembre de 2005) fue un geólogo francés experto en geomorfología costera, incluida la tectónica del Holoceno y el cambio del nivel del mar . [1] [2] Mientras estuvo activo estudiando la costa de los países donde ocupó puestos universitarios, es decir, Chile, Francia y Túnez, también realizó estudios en Bahrein , Malta , las Seychelles y las Islas Mascareñas .

Roland Paskoff
Nacido20 de marzo de 1933
Oujda , Marruecos
Murió14 de septiembre de 2005 (72 años)
Francia
Nacionalidadfrancés
CiudadaníaFrancia
alma materUniversidad de burdeos
Conocido porGeomorfología costera
Carrera científica
CamposGeomorfología
InstitucionesUniversidad de Chile Universidad de
Túnez
Universidad de Lyon

San Pedro de Atacama : elementos diagnósticos para un plan de desarrollo local / Ximena Aranda Baeza.
por Aranda Baeza, Ximena [autor.] | Corfo (Chile) [autor corporativo. ].
Editor: Santiago : Corfo : Universidad de Chile, Instituto de Geografía, 1968

Cifras Primer Curso Matemáticas / R. Rodríguez Vidal



Precio : $ 20.000


Artículo Usado
Estado : Muy Bueno
Disponibilidad : 1
Género : Matemáticas
Idioma : Castellano


188 páginas
7° edición 1963
Medidas :
15.3x21 cms.

Cifra (matemática)


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Los diez dígitos utilizados en la cultura occidental. Con ellos podemos representar gráficamente los números.
Una cifra es un símbolo o carácter gráfico que sirve para representar un número.1​ Por ejemplo, los caracteres «0», «1», «2», «3», «4», «5», «6», «7», «8» y «9» son cifras del sistema de numeración arábigo, mientras que los caracteres «I», «V», «X», «L», «C», «D» y «M» son cifras del sistema de numeración romano.
Las cifras se usan también como identificadores en: números de teléfono, numeración de carreteras; como indicadores de orden en: números de serie; como códigos (ISBN), etc.

Cifra y numeral[editar]

Un numeral es una cadena de cifras utilizada para denotar un número (no un código identificativo). A modo de ejemplo, los numerales «21», «2», «3», «4» y «500» representan en el sistema arábigo los mismos números que los respectivos numerales «XXI», «II», «III», «IV» y D» en el sistema romano.

Cifra y dígito[editar]

Un número dígito es un número que puede expresarse empleando un numeral de una sola cifra.2​ Por extensión se puede decir que un dígito es cada símbolo o guarismo de los usados para expresar un numeral o un número.
Guarismos en minúsculas para el sistema decimal.
En el sistema decimal son: 0, 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8 y 9. Así, 157 se compone de los dígitos 1, 5 y 7. El nombre dígito proviene del latín dígitus dedo, porque los 10 dedos corresponden a los 10 dígitos en el sistema numérico común en base 10, esto es, un dígito decimal.
En matemáticas y ciencia de la computación, un dígito numérico es un símbolo, v.gr. «3», que usado en combinaciones, v.gr. «37», representa números (enteros o reales) en sistemas de numeración posicionales.
Por tradición, al menos desde la época del Antiguo Egipto, se usa el sistema decimal, debido al arcaico uso de los diez dedos para ayudarse a contar, aunque no hay ninguna razón especial para que un sistema de numeración deba utilizar la base diez.
En el sistema decimal se necesitan 10 dígitos, aunque tienen diferente valor en función de su posición en el numeral, pues su valor varía de diez en diez, esto es unidades, decenas (101), centenas (102), millares (103), y así sucesivamente, de modo que un dígito a la izquierda tiene diez veces el valor de la posición dada y a la derecha la décima parte del valor de la misma.1​ Para separar valores menores a la unidad se usa el punto decimal (en Europa la coma). Este método de notación posicional, proviene de la India y fue transmitido a Occidente por los matemáticos musulmanes durante la Edad Media.
El más simple es el sistema binario, que solo precisa dos dígitos, generalmente representados por 0 y 1; en el sistema binario varían dos en dos: unidades, parejas (21), cuartetas (22), y así sucesivamente. Es un sistema profusamente empleado en informática.
Ejemplos de dígitos incluyen cualquiera de los caracteres decimales desde «0» hasta «9», o de los caracteres del sistema binario «0» o «1», y los dígitos «0»...«9», «A»,...,«F» usados en el sistema hexadecimal. En un sistema de numeración dado, si la base (radical, en inglés en:radix) es un entero, el número de dígitos necesarios, para la parte entera, es igual al siguiente entero del logaritmo del número a representar dividido entre el logaritmo de la base. Para la parte fraccionaria el número de dígitos dependerá de la precisión necesaria a manejar.

Signos gráficos[editar]

En los sistemas de numeración, los dígitos se combinan para representar distintos números. Si el valor viene determinado por la posición del dígito, se habla de notación posicional. Si los dígitos tienen un valor fijo, que no depende de su posición, se habla de notación aditiva, como, por ejemplo, la numeración romana.
Valor01234567891020304050607080901002003004005006007008009001 00010 000
Cifras árabes, alfabeto occidentalابجدهوزحطيكلمنصعفضقرستثخذظغش
Cifras árabes, alfabeto orientalابجدهوزحطيكلمنسعفصقرشتثخذضظغ
Cifras árabes oriental٠١٢٣٤٥٦٧٨٩
Cifras árabes extremo oriente۰۱۲۳۴۵۶۷۸۹
Cifras chinas o japonesas
Cifras europeas0123456789
Cifras griegas iónicasαβγδεϛζηθικλμνξοπϟρστυφχψωϡ
Cifras hebreasאבגדהוזחטיכלמנסעפצקרשת(ך)(ם)(ן)(ף)(ץ)
Cifras romanasIVXLCDM
Cifras thaï

Origen y evolución de la palabra cifra[editar]

El cero de los doctos[editar]

Cuando los árabes del siglo X adoptaron la numeración de la India, tradujeron la palabra «sunya», que significaba ‘vacío’ o ‘en blanco’, por «sifr», ‘vacío’ en árabe. Después, el sistema de numeración indo-arábigo fue introducido en Italia y la palabra «sifr» se latinizó como «zephirum». El proceso comenzó a principios del siglo XIII y con el correr del tiempo una sucesión de cambios culminó con la palabra italiana «zero».
Casi paralelamente se desarrolló un proceso similar en AlemaniaJordanus Nemorarius cambió la palabra «sifr» por «cifra». Durante un tiempo en Europa ambas palabras denotaban el cero. Como uno de los testimonios de esta etapa, la palabra inglesa «cipher» tiene actualmente dos significados: ‘cifra’, en el sentido moderno, y ‘cero’ en su forma arcaica, de acuerdo a su etimología.
Las palabras «cifra», «chiffre», «cipher», «ziffer» y «zero» representaban el cero para los doctos.

La cifra de las masas[editar]

La historia no contempla los títulos y honores de los doctos. Los procesos sociales cambian irremediablemente algunos de los conceptos originales. Cuando la masa adopta un uso, es inútil todo esfuerzo en sentido contrario.
En la Edad Antigua y en la Edad Media los cálculos eran realizados por expertos. Hasta la adopción definitiva del sistema de posición y el cero, la multiplicación y la división se realizaban por duplicaciones y mediaciones, respectivamente. Por ejemplo, para multiplicar un número por 13 se descomponía al multiplicador en potencias de 2, en este caso, 8 + 4 + 1. El multiplicando se duplicaba dos y tres veces. Luego se sumaban la triple duplicación, la doble duplicación y la cantidad original. La división seguía un proceso análogo pero inverso. Los cálculos demandaban mucho tiempo de trabajo y el costo era elevado. Puede observarse un residuo de esto en la forma en que se subdividen las medidas antiguas, como la pulgada inglesa: medios, cuartos, octavos, dieciseisavos, treintaidosavos.
Los comerciantes de aquellos tiempos debían solventar esos gastos para tener control e información de sus negocios. Cuando llegó a ellos la noticia del nuevo sistema de numeración, vieron muy prontamente la ventaja que les daría. Los cálculos eran fáciles de realizar y ya no hacía falta una formación superior para dominar las operaciones aritméticas. No tendrían que pagar por el servicio de un experto.
Es realmente notable que estas personas se dieran cuenta del papel fundamental del cero en el nuevo sistema. La masa identificó todo el sistema con su rasgo más característico, la cifra, usando, entonces, cifra con el sentido de signo numérico que tiene hoy en nuestra civilización. Este uso era totalmente opuesto al significado de la cifra de los doctos.

El secreto y la lucha[editar]

Los comerciantes consideraron que era prudente reservar ese uso para ellos, como una ventaja. El sistema se utilizó en secreto. De esta forma, la palabra «cifra» era usada como un signo secreto. De esa etapa sobreviven las palabras «descifrar» y «cifrado». Un código cifrado es un texto de significado inaccesible si no se dispone de la clave. Cuando se obtiene la clave el secreto queda revelado, el código secreto se descifra, «se le quita el cero» o el secreto.
Por motivos egoístas los comerciantes guardaron para sí el sistema. Por otro lado, hubo una reacción de parte de los partidarios de las tradiciones y defensores de antiguas filosofías, a la que se sumaron quienes vivían de los cálculos difíciles de antaño. Por estas razones, el sistema tardó mucho en imponerse. La lucha duró desde el siglo XI hasta el siglo XV. En algunos lugares hasta fue prohibido. Pero hacia principios del siglo XVI ya estaba decididamente establecido y no sufrió ningún retraso en su desarrollo.
Los partidarios del sistema de posición se denominaban «algoristas» y los defensores del viejo sistema, «abacistas», porque en sus cálculos utilizaban el ábaco. En esos tiempos también «abaci» era sinónimo de aritmética.

El uso actual de la palabra[editar]

Una vez que quedó completamente adoptado el nuevo sistema, el uso de la palabra «cifra» en el sentido de un signo numérico estaba tan fuertemente arraigado que fue inútil el esfuerzo de los doctos por volver al significado original de ‘cero’. No tuvieron más remedio que dejar «cifra» con ese sentido y tomar «zero» para designar al espacio vacío hasta llegar al uso que tiene ahora.3

Otros significados[editar]

En astronomía un dígito astronómico es cada una de las partes iguales en que se divide el diámetro de los discos lunar y solar para expresar la importancia de un eclipse. Así, un eclipse de Luna de 8 dígitos afecta a los dos tercios del diámetro de nuestro planeta (ver magnitud de un eclipse).

Véase también[editar]

Referencias[editar]

  1. ↑ Saltar a:a b Incorporated, InterLingua com (2009). SPANOTES Mathematics - Bilingual CD: A bilingual study aid for secondary school Mathematics. InterLingua Publishing. ISBN 9781884730023. Consultado el 15 de febrero de 2018.
  2.  DRAE: Número dígito
  3.  Tobías Dantzig; (1971). El Número Lenguaje de la Ciencia; Capítulo II: La Columna Vacía. Buenos Aires; Editorial Hobbs Sudamericana S. A., de la 4ª edición en inglés, en rústica.

Enlaces externos[editar]